LIBROS
TELONES DE ARENA: NOTABLE INVESTIGACIÓN SOBRE LA HISTORIA DEL TEATRO EN SAN JUAN

Jorge Dubatti

 

Telones de arena es una nueva muestra de la madurez alcanzada por los grupos de investigación teatral radicados en las provincias argentinas. El libro recoge una historia del Instituto Superior de Artes (ISA) de San Juan, cuyas actividades se desarrollaron entre 1959 y 1965. El ISA tenía un pequeño Teatro de Cámara, el Globito, llamado así tanto por su arquitectura combada como por la cariñosa remisión a El Globo shakesperiano. Había sido construido con el esfuerzo y los materiales provistos por la comunidad teatral sanjuanina. Una mañana, para sorpresa y desconsuelo, El Globito ya no estuvo más. Sin previo aviso, a la madrugada, bien temprano, las autoridades municipales lo hicieron derribar con topadoras porque necesitaban el predio.

¿Por qué hacía falta escribir una historia del ISA? Porque -como sostienen los investigadores- dicha institución constituye un momento fundamental en la historia de la escena sanjuanina y resulta generadora de las condiciones de posibilidad del teatro actual en la provincia. Sin la existencia del ISA el presente del teatro sanjuanino no sería el mismo. Por otra parte, porque El Globito es un símbolo y una bandera de los desencuentros entre los intereses de la comunidad teatral y las políticas oficiales.

Dirigida por Juan Mariel Erostarbe y Alicia Castañeda en la Universidad Nacional de San Juan, esta investigación descubre la singularidad del funcionamiento de los campos teatrales en provincia, y específicamente en San Juan, "mundo sísmico, donde los terremotos borran en segundos por acción natural las huellas de monumentos del pasado" (p. 15). Gracias a esta investigación la historiografía teatral argentina incorpora un capítulo fundamental de su historia.

Telones de arena es la segunda entrega del programa de investigación DICDRA -Desarrollo de la Investigación y Creación Dramática- que se desarrolla en la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de San Juan. La primera fue Sarmiento y la puesta en escena del siglo XIX, publicada en San Juan en el 2001 por el sello editorial Fundación Ateneo. Telones de arena se publica como homenaje a los treinta años de la creación de la Universidad.

Desde el punto de vista epistemológico, el equipo sanjuanino considera el teatro como acontecimiento histórico vinculado a la cultura. La metodología es interdisciplinaria o multidisciplinar: combina la historia de vida y el testimonio ("polifonía de voces, cruce de narraciones", p. 15) con la consulta de periódicos y documentos institucionales, el análisis semiótico, la noción de campo intelectual y los aportes de diversos investigadores argentinos (en el uso de las nociones de convivio y resiliencia). Se suman conceptualizaciones específicas, como la de "persistencia", propuesta por Jorge Fernández y Norma Velardita, para definir la actitud de resistencia frente a la indiferencia y el vacío cultural. Alicia Castañeda señala desde el comienzo que "el fenómeno teatral en provincias se comporta de manera diferente" (respecto de la capital nacional, p. 13) y expresa la necesidad de elaborar herramientas adecuadas para la percepción de esa singularidad: "¿Cómo encasillar una producción que de entrada se halla desfasada de las clasificaciones genéricas tradicionales? ¿Cómo evitar esterilizar las lecturas de fenómenos artísticos provinciales al intentar aplicarles la profusión de etiquetas heredadas y construidas para dar cuenta de otras realidades?" (pp. 13-14). A lo largo de las casi doscientas páginas de Telones de arena surgen diversas observaciones sobre la cuestión: la "no profesionalización", el "no ocupar un lugar definido ni definitivo", el hecho de que el teatro en San Juan "a veces actúa desde una centralidad como generador en el campo de la cultura local, y otras se desplaza hacia los márgenes del sistema" y se da interrelacionado con otras actividades artísticas: plástica, danza y música (p. 13). En el cierre del libro la dramaturga Susana Lage pone el acento en los fenómenos de "intermitencia", "discontinuidad", "nacimiento y dilusión", "interrupciones", "retrocesos" (p. 168), en la conflictiva relación entre campo teatral y campo de poder político estatal y en cómo "el programa sarmientino que soñaba el teatro como factor de evolución de la cultura fue desatendido por los gobiernos provinciales" (p. 168).

Luego de la Introducción de Castañeda, Susana Zibarelli presenta el contexto histórico y social de San Juan bajo el gobierno provincial desarrollista del Dr. Américo García (gobernador entre 1958-1962, año en que fue desplazado por el golpe militar). García fue el responsable de la designación del poeta Rufino Martínez como primer Director General de Cultura (1958-1960). En octubre de 1958, por Ley Nº 2074 Artículo 2º, se establece "la creación del Instituto Superior de Arte Escénico y bajo su dirección el Teatro Vocacional, Teatro de Títeres, Teatro Infantil, una Escuela de Declamación y Danzas, Coro Infantil, conjunto de Radio Teatro y un Círculo Cinematográfico Provincial" (p. 29).

Gisela Ogás Puga estudia a continuación dos instituciones culturales que constituyen antecedentes valiosos del ISA: Oasis y Refugio, fundadas respectivamente en 1932 y 1939. Según la investigadora, estas instituciones habrían preparado las condiciones para la aparición del campo intelectual en San Juan, que coincide con la creación del ISA. Ogás Puga afirma: "A partir del ISA, el campo intelectual-artístico sanjuanino deja de ser un campo incipiente, en formación, basado en intentos aislados, parciales, sostenidos únicamente en forma privada de manera intermitente a lo largo del siglo XX y privativos de una elite, para convertirse en un campo institucionalmente legitimado, vinculado por primera vez con un organismo gubernamental (la Dirección Provincial de Cultura), sostenido en el tiempo, socialmente abierto, formador y productor de nuevos agentes intelectuales cuyo profesionalismo y persistencia coadyuvaron a la posterior consolidación del campo intelectual-artístico sanjuanino. Algunos ex alumnos del ISA como Oscar Kümmel (teatro), Violeta Pérez Lobos (danza) y Silvina Martínez (plástica) enuncian ejemplos representativos de este fenómeno" (p. 36).

María Isabel Crubellier traza el recorrido que va de la creación de la Escuela de Arte Dramático (1959) a la apertura del ISA (1960), a través de testimonios y de materiales de la prensa. A partir de 1960 funcionan en el ISA, además de la EAD, la Escuela de Artes Plásticas, la Escuela de Música, la Escuela de Danza, la Escuela Experimental de Títeres, y en forma anexa la Biblioteca Sarmiento de Lenoir. Crubellier reseña los estrenos realizados en el ISA y las actividades teatrales generadas fuera de él por teatristas docentes o formados en la institución. Jorge Fernández se detiene en una reconstrucción del Teatro de Cámara del ISA, El Globito, inaugurado en octubre de 1963, destruido en febrero de 1965 y devenido en mito del campo teatral sanjuanino actual, tanto por el valor de los estrenos en él concretados como por la brutalidad de su demolición.

Cristina Castro trabaja sobre las producciones teatrales de la Escuela de Arte Dramático.

Jorge Fernández y Norma Velardita proponen el ya mencionado concepto de persistencia para pensar el legado del ISA en la tarea artística y docente de quienes continuaron trabajando en el campo artístico sanjuanino luego de la disolución de la institución en 1965. El trabajo se enriquece con los testimonios y reflexiones de Oscar Kümmel, Hebe Almeida de Gargiulo y Silvina Martínez. Este capítulo se complementa con las entrevistas realizadas por Juan Mariel Erostarbe a Luis Oscar Suárez Jofré, Violeta Pérez Lobos, el preceptor Nicolás Jesús Luna y la viuda de Rufino Martínez, Rosa Such.

El volumen se cierra con una página de Susana Lage en la que reflexiona sobre el ejercicio de la memoria y el valor del pasado como símbolo: "La imagen de una topadora que arrasa un edificio teatral, y simbólicamente demuele un proyecto, no sólo es la conclusión de un relato que tiene la estructura aristotélica de la tragedia sino, y fundamentalmente, metáfora de lo que se reduce al residuo, a la huella. Y en dos sentidos: por un lado comienzan a proliferar desde los escombros agrupaciones teatrales independientes, con la dispersión de las esquirlas luego de la explosión (...) Por otro, el residuo de la memoria y la tarea de reconstrucción historiográfica por parte del equipo de investigadores de este libro, el otro relato, el de la muerte, resurrección y conservación del recuerdo" (p. 169).

Telones de arena refuta absolutamente la expresión "teatro argentino" como sinónimo de "teatro de Buenos Aires", así como la errónea idea de que el teatro en las provincias es una epígono atrasado, a destiempo, del teatro metropolitano. El equipo de investigadores piensa el teatro de San Juan como un producto y una forma de producción con identidad estética y cultural, en los que los intercambios entre Buenos Aires y la provincia no son copias sino apropiaciones productivas. Lage afirma: "El proceso del ISA no es ajeno al vivido por varias provincias de nuestro país. La urgencia de una profesionalización del quehacer teatral, relacionada con lo pedagógico, tuvo las marcas comunes de recurrencia a asesorías externas, profesores invitados que pudieran producir el esperado desarrollo del campo teatral local. Así, el ISA nutrió sus aulas con docentes que llegaron a la provincia desde Buenos Aires trayendo métodos de actuación, textos y propuestas estéticas (vgr. Adelaida Hernández de Castagnino y Juan Carlos Pássaro)". Y Lage concluye, imponiendo un cambio de perspectiva sobre el tema del supuesto epigonismo: "Esta fructífera relación entre la cultura central y la periférica aprovechó, como en el resto de las provincias, los préstamos, apropiándose de textos culturales con la intención de establecer circuitos teatrales vernáculos y así legitimar su espacio y su derecho a lo que pertenece a todo el país" (p. 168).

La figura del título es acertada y múltiple. Los "telones de arena" son, por un lado, el resultado del encuentro de dos metonimias (figura de contigüidad de la parte por el todo): telón por teatro y arena por San Juan. Por otro, responden a un sentido metafórico: "telón" es aquello que tapa o destapa, que oculta o desoculta, que cubre o descubre, que deja o no deja ver. Los "telones" de arena son el ejercicio de la evocación o del olvido, que respectivamente abre o baja el telón a la "escena de la memoria y la identidad", de acuerdo con las palabras citadas de Castañeda. La arena puede ser, en este caso, el desierto que amenaza a la ciudad, las fuerzas destructivas del vacío sobre las frágiles construcciones de la cultura y la voluntad humana.

Hay que destacar el material fotográfico reproducido y un Anexo con la Ley 2074 y la lista de docentes y alumnos de la Escuela de Arte Dramático (1959) y el ISA (1960-1965), entre los que figuran muchos de los exponentes más importantes del teatro sanjuanino de las últimas décadas.

En suma, la madurez de este trabajo queda expresada en diversos aspectos:
- en la capacidad de atender cuestiones locales o regionales de pertenencia, e identificar problemas y campos de trabajo específicos;
- en la toma de conciencia de la singularidad cultural y el valor del objeto estudiado, resultado de la superación de prejuicios soberbios e inmovilizadores;
- en el reconocimiento de la soledad del objeto y la percepción del llamado a atender el reclamo de esa soledad;
- en la búsqueda de metodologías, marcos teóricos y fundamentos epistemológicos adecuados al objeto de estudio;
- en el rechazo de la aceptación acrítica de modelos fundados en el teatro de la metrópoli y promocionados desde allí;
- en el reconocimiento de la historia como una necesidad política para la identidad, la construcción memorialista y los basamentos del futuro teatro;
- en la valentía de asumir el riesgo de diseñar nuevas categorías historiológicas (como la de "persistencia");
- en el pasaje del rol pasivo de "investigador acreedor y paciente", condenado a encajonar sus trabajos, al nuevo modelo de "investigador gestor", capaz de generar trabajo grupal, espacio de edición, circuito de contacto con los lectores, campo y redes de lectura, formación de inteligencia;
- en el regresar el teatro al teatro, en este devolverle su dimensión material de acontecimiento convivial y poético.

Para terminar, expresamos nuestro deseo de que el equipo de investigadores de la Universidad Nacional de San Juan no se detenga, y a sus dos libros ya publicados sume futuros títulos de igual valor.